Estas extrañas pero indefensas criaturas son producto del dibujo automático. Técnica DADA que consiste en encender el proceso creativo con la mente en modo inconsciente. En este estado, al igual que en los sueños, la mente mezcla al azar personajes, objetos, situaciones provenientes de diversos ambientes y épocas. En la mayoría de las veces el resultado son aberraciones incongruentes con la supuesta realidad que vivimos, y el ejercicio se trata de capturar estas escenas , manteniendo al margen toda ingerencia de la conciencia, para luego depurarlas durante la ejecución del trabajo.
Estos extraños personajes avergonzados de su nada común aspecto se encierran a vivir ocultos en la oscuridad, con el único entretenimiento de reproducirse valiéndose de sus facultades hermafroditas, y observan la vida pasar a través de una ventana. Pero un día se cansan y se liberan de todo complejo y salen a conocer el exterior pero se sorprenden de ver que no hay nadie afuera, solo viejas construcciones completamente vacías donde ni los fantasmas se atreven a vivir.